top of page
Publicado el 7-3-2020

En la pera: La crisis económica de Cambiemos

Por Eugenio Heinze

Al poco tiempo de su asunción, el gobierno de la alianza Cambiemos, tomo como parte de sus primeras medidas económicas, levantar la restricción de compra de dólares para atesoramiento “cepo” y paso a administrar el tipo de cambio a dejarlo flotar libremente. Se escucho por aquel entonces jactarse a Macri y a su equipo económico de haber levantado el cepo en pocos días, y decir que los dólares iban a sobrar por que el mercado confiaba en él. El mismo optimismo tenía con la inflación sobre la cual dijo “que es una muestra de la incapacidad de gobernar”.  Hoy con el diario del lunes sabemos que los dólares fueron un problema muy serio y la inflación también.

En los años 2016 y 2017 el dólar no fue un problema. La desregulación del sistema financiero propuesta por el gobierno que permitía libertad plena a los movimientos de capitales, quitándole el mínimo de permanencia en el país, sumado a una elevada tasa de interés local con margen sobre la internacional, atrajo muchos capitales de corto plazo. El problema de éstos es que sólo buscaban obtener una rápida ganancia y jamás se convirtieron en inversiones reales productivas. Esto es el carry trade, la famosa bicicleta financiera. Nunca llegamos a ver la lluvia de inversiones ni el segundo semestre que tanto nos prometieron, y muchísimo menos “la pobreza cero”. Sino todo lo contrario.

metas.jpg

En cuanto a la inflación, en 2016 se aceleró, al levantar el tope a la compra de dólares, pasando a un tipo de cambio flotante y al quitar los subsidios a la energía y el transporte. Nosotros en EL MULTIPLICADOR tenemos una visión heterodoxa de la economía, para nosotros la inflación no es solamente un fenómeno monetario como nos dice la corriente de pensamiento dominante, ésta es un fenómeno multicausal. Por lo tanto, que suba el dólar encarece las importaciones, lo que hace que las materias primas que se utilizan para producir se encarezcan. También hay muchos empresarios que “dolarizan” sus ganancias, más aún en un contexto devaluatorio, y de incertidumbre, lo cual hace que por más que no tengan insumos en dólares suban los precios para cubrirse o para tratar de mantener su margen de ganancia en dólares. Y además, el fuerte aumento de las tarifas de electricidad, gas y la suba del precio de la nafta, (todos insumos básicos para producir cualquier bien y transportarlo) aportaron bastante a la suba de la inflación. En síntesis, el 2016 fue un año con caída del PBI de 2.08%, y una inflación de 36,6%* (según datos del BCRA.).

En 2017, con la ya mencionada entrada de capitales por la bicicleta financiera, el dólar se mantuvo estable, y la inflación se desacelero. Este fue un año electoral en donde el gobierno, para ganar las elecciones freno la subida de tarifas y salió a hacer obra pública. Éste fue el único año de la gestión de cambiemos con alza del PBI y descenso del ritmo de la inflación. El PBI creció un 2.6% y la inflación fue de 24.8 % en 2017. La mejora en las principales variables económicas y la victoria en las elecciones legislativas de ese año hacían parecer que todo era perfecto para el gobierno. Pero la realidad era que todo estaba atado con alambre, había una bomba de endeudamiento público a punto de estallar que fue facilitada por la desregulación financiera antes mencionada.

Dolar.jpg

Junto con los Reyes de enero de 2018, empezaron los problemas serios para la gestión de cambiemos. El gobierno sólo, con sus políticas antes mencionadas, se fue metiendo entre la espada y la pared. Los primeros datos económicos del 2018 no fueron buenos, la inflación se empezó a acelerar, y la economía a paralizar. El 25 de abril del 2018, cambiaron las expectativas y los flujos entrantes se revirtieron. Los capitales comenzaron a salir causando la primera corrida, llevando la divisa cada vez a valores más altos, y con ésta se perdieron muchas reservas. El modelo de cambiemos concluyó en nada menos que la vuelta del FMI a la Argentina.

La segunda crisis cambiaria se dio el 14 de junio, un día después de que la FED subiera las tasas, provocando devaluaciones en gran parte del mundo, aunque acá el efecto fue mucho mayor. Ese fue el fin de Sturzenegger como presidente del BCRA y la llegada de Luis “Toto” Caputo, (el Messi de las finanzas) a la presidencia de éste. Caputo decidió junto con el FMI, intervenir el mercado de divisas con una manera poco efectiva, subastando dólares. Mientras que en el mercado primario de Lebacs subió las tasas de interés y absorbió más pesos. Pero esta intervención tampoco pudo contener el precio de la divisa norteamericana.

Pero quédense tranquilos que el gobierno no sólo nos hizo perder parte de nuestro salario y ahorro. El Messi de las finanzas hizo perder mucho dinero también a grandes fondos de inversión del extranjero. El economista Pablo Bortz, en un artículo en la revista Anfibia, titulado “Cuantos dólares necesitara el próximo gobierno” nos dice: “El 15 de mayo de 2018, Nicolás Dujovne y Luis Caputo (entonces ministro de Finanzas) anunciaron los resultados de una licitación de Bonos del Tesoro por $73.249 millones. Esos bonos estaban denominados en pesos, con vencimiento en 2023 y 2026, con una tasa fija de 19 y 20%. Fueron adquiridos por grandes fondos de inversiones internacionales (Franklin Templeton, Alliance Bernstein y BlackRock, entre otros) a un tipo de cambio de 24,77 pesos por dólar. Con ese ingreso de aproximadamente U$S 3.000 millones y la oferta de otros U$S 5.000 millones de parte del Banco Central, se consiguió una calma transitoria ante la corrida cambiaria de ese momento. El nombre de esos bonos, BOTEs, fue otra cuota de color dentro de una historia de endeudamiento y crisis que Argentina parece recorrer una y otra vez. A los tres meses de la compra, los fondos perdieron un tercio de lo que habían invertido en los BOTEs, y siguieron perdiendo por muchos meses más.”( http://revistaanfibia.com/ensayo/cuantos-dolares-necesitara-proximo-gobierno/)

Reservas .jpg

Desde abril del 2018, las reservas de dólares han ido mermando, el BCRA salió a vender reservas para contener el valor de la divisa norteamericana. Sturzenegger vendió unos 13 mil millones y no pudo contener al tipo de cambio. Caputo vendió unos 14 mil millones y tampoco pudo. En el gráfico de reservas podemos ver como éstas caen a pesar de los 47 mil millones que nos prestó el fondo. Las reservas del BCRA han estado en caída, hasta después de las elecciones PASO 2019 cuando se volvió a instaurar la restricción a la compra de dólares.

El gobierno de cambiemos fiel a su gestión le echo la culpa a todos menos a sus políticas (por lo menos pudieron tener un poco de autocrítica). Primero, le echaron la culpa al impuesto a la renta financiera propuesto por Sergio Massa. Luego, a la guerra comercial entre EEUU y China, a la subida de tasas de la FED, a la crisis turca y la más graciosa es a la inestabilidad política que genera el Kirchnerismo. Incluso llegaron a decir que los mercados estaban espantados por una vuelta del populismo cuando hacía unos pocos meses habían ganado una nueva elección. La realidad es que claramente las políticas neoliberales y el manual de economía ortodoxa fallaron nuevamente en la Argentina. En 2018 la inflación fue de 47.6 % y en 2019 de 53.8 % la más alta desde la hiper del ‘89-‘90.

Cambiemos tuvo el apoyo de la gente en 2 elecciones, el de los medios, el del poder judicial y el de los mercados financieros (tanto local como internacional), y se la dieron en la pera igual. El paredón estaba enfrente y aceleraron en vez de frenar. Tardaron mucho en volver a poner un tope sobre la compra de dólares y los controles sobre a entrada y salida de capitales. En la era Macri se fugaron U$S 88.371 millones, cerca del doble de lo que se le pidió al fondo, y más del doble de las reservas que dejaron.

Vinieron prometiendo pobreza cero y la aumentaron, tomaron el país con 29% de pobreza y se fueron con 40.5%. Vinieron a bajar la inflación y la aumentaron, 163% subió el IPC, y además la inflación de productos básicos como alimentos, medicamentos y energía es muy superior (afectando a los sectores de menores ingresos). Vinieron a levantar el cepo y lo terminaron endureciendo. Vinieron a quitar retenciones y las tuvieron que volver a poner. Llegaron prometiendo una lluvia de inversiones y dólares, la inversión cayó y nos dejaron una brutal deuda en dólares que condicionará la política económica del país por varios años. Agarraron el país con una deuda del 45 % del PBI y se fueron con una deuda en torno al 90% del PBI. Son innumerables los desastres económicos y sociales generados por este gobierno, que desfinanció salud, educación, etc. Así que entrar en más detalles quedara para otra ocasión. La realidad es que vinieron a instaurar políticas neoliberales similares a las de Martínez de Hoz en la dictadura, con resultados nefastos similares, que dejaron a mucha gente sin empleo, empresas endeudadas y quebradas y un país endeudado y condicionado por mucho tiempo. Neoliberalismo nunca más.

bottom of page